Parroquia El Buen Pastor – República Dominicana

Valor del Mes:
Honestidad
Lema del Mes:
"Hágase en mí según tu palabra" (Lc. 1, 38)

Memoria de Santa Ángela de Mérici, virgen

“Galilea de los gentiles, al otro lado del Jordán, el pueblo que caminaba en tinieblas vio una Luz Grande”. Es Cristo, Luz de los pueblos cuyo alumbramiento en la Navidad es una prolongación que alcanzará su culmen en La Presentación del Señor. Y de esa Luz se hacen acopio para darla, los Santos. Nos encontramos hoy en el calendario con una de ellas: con Santa Ángela de Mérici.

Nacida en Italia en 1470, lleva una infancia muy sufrida, lo que le hace tremendamente compasiva con las niñas pobres de la época. Pronto se hará Terciaria Franciscana, extendiéndose su fama de santidad entre muchos nobles y personajes importantes que le piden consejo para resolver muchos asuntos.

En pleno Renacimiento, cuando se está elaborando un mundo nuevo, en el momento en que la herejía de Lutero empieza sus estragos, esta humilde creyente, sin letras, comprende que la ignorancia es la gran plaga de la Iglesia, y organiza para la educación de las niñas lo que San Ignacio de Loyola en favor de los jóvenes.

No solamente no saben leer ni escribir, sino que viven en la más absoluta ignorancia en lo referente a la temática religiosa. Nadie les enseña los pilares de la Fe, y ella se ve en la necesidad de ayudarles. Incluso observaba que todo el mundo estaba empeñado en organizar la vida como si Dios no existiera. Así funda las ursulinas, en honor de Santa Úrsula, a la que Ángela profesaba gran devoción.

Una de sus tareas prioritaria fue preparar unas asociaciones en cada barrio donde se enseñase el catecismo. Su carácter dinámico y alegre, hizo que la Congregación que se inició en Brescia, se propagase por todo el orbe.

Por otra parte, la fundadora determina que, dócil a la autoridad eclesiástica, el Instituto se adapte a los tiempos y lugares. «A estas dos Compañías de Ursulinas y Jesuitas, deben principalmente muchas naciones de Europa haber conservado la verdadera doctrina católica».

Las ursulinas surgen en 1535, y a los cinco años muere la fundadora, San Ángela de Mérici, siendo canonizada el año 1807. Su amor a Cristo, se puso de manifiesto en sus últimas palabras antes de morir, musitando sus labios el santo nombre de Jesús.

Fuente: Cope