Parroquia El Buen Pastor – República Dominicana

Valor del Mes:
Honestidad
Lema del Mes:
"Hágase en mí según tu palabra" (Lc. 1, 38)

Cómo la oración pascual a María terminó con la peste

Cómo la oración pascual a María terminó con la peste

La historia del Regina Coeli y su relación con la imagen Salus Populi Romani

 

La Iglesia nos ofrece cuatro oraciones a la santa Virgen María, rezadas al final de cada oración de la tarde por los católicos en donde se encuentren; cuál se use depende del periodo del año. Del Adviento a la Candelaria rezamos el Alma Redemptoris Mater, durante el periodo pascual, el Regina Coeli; de Pentecostés al final del Tiempo Ordinario, el Salve Regina; mientras que en Cuaresma, el Ave Regina Caelorum.

Hemos apenas empezado con el Regina Coeli, y este año no podría ser más apropiado. Según la leyenda, esta oración se remonta al siglo VI con el Papa Gregorio Magno. Una grave forma de peste devastó Roma, cobrándose también la vida del papa Pelagio II.Fue una época difícil para los habitantes de la ciudad, y cuando Gregorio I fue elegido para guiar a la Iglesia invocó inmediatamente la misericordia de Dios.

Papa Gregorio (que enseguida sería conocido como papa san Gregorio Magno) guió una procesión desde la Basílica de San Pedro al Mausoleo de Adriano pidiendo el fin de la peste, e invitando a rezar a Dios para que terminara esa peste.

Haga click aquí para abrir el carrusel fotográfico de la devoción a la imagen por el papa Francisco.

La Leyenda Dorada narra cómo la procesión fue guiada por una antigua imagen de la Virgen María, que limpiaba el aire de la enfermedad. Se cree que esta imagen de la Virgen es de hecho la que el papa Francisco usó durante las liturgias de la Semana Santa, la Salus Populi Romani, atribuida a san Lucas.

“La peste estaba aún devastando Roma, y Gregorio ordenó que la procesión continuara por toda la ciudad, con los participantes que cantaban letanías. Una imagen de la santa siempre Virgen María fue llevada en procesión…

Y mira qué casualidad, la suciedad venenosa del aire cedió frente a la imagen como si se alejara de ella y no pudiera soportar su presencia. El paso de la imagen causó una maravillosa serenidad y pureza en el aire.

Se dice que alrededor de la imagen se oían voces angelicales que cantaban:

Regina coeli laetare, alleluia,
Quia quem meruisti portare, alleluia,
Resurrexit sicut dixit, alleluia!”

El Papa Gregorio añadió enseguida Ora pro nobis, Deum rogamus, alleluia!

Mientras la procesión continuaba su camino, San Gregorio llegó al mausoleo del emperador y vio una señal que traía paz al alma.

“Luego el Papa vio un ángel del Señor de pie sobre el castillo de Crescencio, mientras limpiaba una espada ensangrentada y la envainaba. Gregorio entendió que eso daba fin a la peste, y eso sucedió realmente”.

Finalmente, se colocó una estatua de San Miguel Arcángel envainando su espada en la parte superior del mausoleo, e inspirados por este evento, los fieles se refirieron desde entonces al mausoleo con un nombre diferente, Castel Sant’Angelo, mientras que el puente cercano se hizo conocido como Ponte Sant’Angelo.

Ese día, la Iglesia de Roma recibió dos dones: la enfermedad fue vencida y fue instituida una nueva oración parra ayudar a los fieles a recordar la alegría incluso en épocas de gran sufrimiento.

El Regina Coeli es una manera rápida de tomar un poco de Cielo y tener una alegría pascual viva, sobre todo en la época difícil que estamos viviendo:

Alégrate, Reina del cielo. Aleluya. 

Porque el que mereciste llevar en tu seno. Aleluya.

Ha resucitado, según predijo. Aleluya.

Ruega por nosotros a Dios. Aleluya.

Gózate y alégrate, Virgen María. Aleluya.

Porque ha resucitado Dios verdaderamente. Aleluya.

Oremos: Oh Dios que por la Resurrección de tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo, te has dignado dar la alegría al mundo, concédenos por su Madre, la Virgen María, alcanzar el gozo de la vida eterna. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor.

Amén.

En latín:

Regina cæli, lætare, alleluia:
Quia quem meruisti portare, alleluia,
Resurrexit, sicut dixit, alleluia,
Ora pro nobis Deum, alleluia.
Gaude et lætare, Virgo Maria, alleluia.
Quia surrexit Dominus vere, alleluia.
Oremus: Deus, qui per resurrectionem Filii tui, Domini nostri Iesu Christi,
mundum lætificare dignatus es:
præsta, quæsumus, ut per eius Genitricem Virginem Mariam,
perpetuæ capiamus gaudia vitæ.
Per eundem Christum Dominum nostrum. Amen.

(Fuente: Aleteia)

Iglesia Católica bendice desde el aire al pueblo dominicano y ora por el final del coronavirus

Iglesia Católica bendice desde el aire al pueblo dominicano y ora por el final del coronavirus

Sacerdotes con el Santísimo Sacramento sobrevolaron en un helicóptero el Distrito Nacional, la provincia Santo Domingo y Bayaguana.

De Diario Libre, 30/04/2020. La Iglesia católica, a través de su Diócesis Castrense, impartió este jueves una bendición especial con el Santísimo Sacramento desde un helicóptero que sobrevoló el Gran Santo Domingo y Bayaguana como parte de una jornada de oración ante la situación que padece el país y el mundo por el coronavirus.

Monseñor Francisco Ozoria, obispo castrense de Santo Domingo, junto a un grupo de sacerdotes inició la bendición durante un acto frente a la iglesia Nuestra Señora del Amparo, en la base Naval 27 de Febrero, desde donde partió el helicóptero con el Santísimo.

La aeronave recorrió amplios sectores de la capital bendiciendo a la ciudadanía, principalmente sectores donde está ubicada la Catedral Primada de América; las iglesia San Antonio de Padua, Cristo Salvador, Santa Cecilia, Nuestra Señora de la Altagracia, en el Ministerio de Defensa; Cristo Rey, Stella Maris en Los Tres Ojos; Espíritu Santo de Villa Mella; el Santuario de Bayaguana y el hospital Ramón de Lara, en la base Aérea de San Isidro.

Dos sacerdotes llevaban la custodia en la puerta del helicóptero y desde allí impartían la bendición a la población, muchos de los cuales colocaban en los techos y balcones de las viviendas pañuelos blancos, alzando Biblias, los brazos y colocándose de rodillas en gesto de humillación y adoración al Santísimo.

El arzobispo Ozoria agradeció el apoyo de la Armada, la Fuerza Aérea y otras instituciones para el acto y aclaró que la bendición no debía ser interpretada como un show mediático, sino como un acto de fe para orar por el país, por los médicos, enfermeras, paramédicos, militares y policía que tienen gran labor en este tiempo de la pandemia del COVID-19.

“Estamos en una situación de dificultades, cada día hay sorpresa, familiares por enfermedad y muerte, hay que confiar en Dios, en su presencia que da esperanza”, dijo el religioso.

En el acto estuvieron, además, de una decena de sacerdotes, la alcaldesa del Distrito Nacional, Carolina Mejía, la cual agradeció la invitación al acto religioso y pidió la bendición de los ciudadanos y el jefe de la Armada, vicealmirante Emilio Recio Segura, entre otras personalidades.

Trini, la religiosa de 101 años que vence al Coronavirus

Trini, la religiosa de 101 años que vence al Coronavirus

 

Gran alegría en el hospital en el momento de su salida

Se llama Trini y es religiosa. Acaba de recibir el alta tras permanecer ingresada por Coronavirus durante un par de semanas. La religiosa pertenece a la Sagrada Familia de Burdeos y tiene 101 años.

En declaraciones a Europa Press, José Antonio Ferreiro sacerdote de la parroquia de Lugo con la que colabora esta religiosa ha expresado la alegría de todo el pueblo y de su comunidad: “Está muy delicada, pero está bien, consciente, sonríe”, destacando que Trini “se alegró mucho al llegar a casa”.

La religiosa de 101 años recibió el alta el 22 de abril en el Hospital Universitario Lucus Augusti de Lugo y abandonó el centro entre aplausos de los médicos y enfermeros y al grito de “¡¡Bravo!! de todos ellos.

El párroco de Lugo afrima que Trini demuestra que “se puede salir adelante” y “da mucho ánimo” y “esperanza”.

Así como Trini, en el mundo se recuperan bebés de pocas semanas de nacimiento y salen del hospital personas a quienes la enfermedad no le daba tregua, como fue el caso en Santo Domingo del primer extranjero registrado con el Covid – 19, quien duró más de un mes ingresado en el hospital Militar Ramón de Lara.  

Historia principal recabada de Aleteia

¿Cómo afrontar los conflictos familiares en medio del confinamiento?

¿Cómo afrontar los conflictos familiares en medio del confinamiento?

Hogar, dulce hogar, ¿siempre y en cualquier caso? La larga batalla contra el coronavirus afecta también a nuestras relaciones familiares.

Artículo tomado de Aleteia

La pandemia de coronavirus, como cualquier otra situación que pone en grave peligro nuestra vida, ha activado la emoción de la supervivencia, el miedo. Ante él tres estrategias de defensa (las tres “f” de origen anglosajón:fight, flight, freezing): el ataque, la fuga y la congelación. 

Mirando este escenario desde un punto de vista social, la comunidad se divide en grupos, de diverso número, que adoptan preferentemente una u otra de estas posibilidades.

En este momento contra el enemigo invisible están los que lo combaten: sobre todo médicos, enfermeros, voluntarios, agentes de policía y fuerzas armadas. Entre los que huyen están los que escapan físicamente del peligro, como los que se marchan de los focos de contagio a segundas residencias, pero también quienes se evaden mentalmente negando la enfermedad y comportándose como si no pasara nada. Y la mayoría está hibernando entre muros domésticos, obligados al letargo social bajo el lema #YoMeQuedoenCasa.

¿Frente al enemigo común aumenta la cohesión?

La casa se convierte en nuestro refugio, y es hoy la línea de defensa más importante, pero también el contexto en el que tanto lo positivo como lo negativo muestra todo su poder de desequilibrar los equilibrios interpersonales.

Cuando hay que enfrentarse con un enemigo común surge la cohesión, según el principio de que la unión hace la fuerza, incluso quienes antes estaban en fuerte desacuerdo o incluso empeñados en un enfrentamiento abierto hasta poco antes de aparecer ese fantasma amenazador. Incluso los enemigos de siempre se alían frente al Monstruo absoluto.

Se asiste a grandes gestos de solidaridad, generosidad, buena educación y respeto mutuo, que intenta exorcizar el miedo infinito a un monstruo tan pequeño e invisible como fulminante y letal, “Todo irá bien”. (psicologiacontemporanea.it)

Todos juntos 24 horas: el equilibrio que vacila

Entre los muros domésticos, se ve ahora a grandes y pequeños conviviendo en un clima de gran solidaridad, en la que cada uno tiene una tarea concreta: quien ordena, quien barre, quien cocina, quien lava los platos, quien hace la compra. Todo esto es bonito y reconfortante pero la guerra se está revelando por desgracia larga y difícil.

Tener en casa a una persona normalmente ausente o presente solo una parte de la jornada, como por ejemplo un anciano, el cónyuge que iba a trabajar o los hijos que estudiaban, puede llegar a agrietar poco a poco un equilibrio que se había construido durante mucho tiempo.

Estalla el fastidio por cosas pequeñas, la molestia ante la dificultad de encontrar un espacio para uno mismo: ¿quizás el joven que quiere escuchar música en voz alta molesta la siesta de los mayores, este tiende a monopolizar de manera obsesiva la TV para seguir los telediarios, o el marido que quiere de repente hacer de chef irritando no poco a la cocinera de la casa, y quien lleva al perro de paseo y hace hacer todos los deberes a los niños pequeños?

Salir para que se te pase el enfado… ¿y ahora que no se puede?

La tensión en casa, especialmente si había un conflicto anterior, evidente u oculto, puede desencadenarse y llevar a las personas a escupirse a la cara lo que “nunca te he dicho”, o a volverse hiper reactivos ante supuestas intrusiones en la privacidad de la habitación o del teléfono.

Ante una tensión doméstica muy fuerte, la solución para calmar los ánimos y desahogar la rabia era salir de casa, pero hoy esto no es posible. Si además en el contexto familiar hay problemáticas psíquicas importantes en uno o varios de sus miembros, el riesgo de una peligrosa escalada de agresividad se vuelve muy fuerte, como sucedió estos días en Roma cuando un joven asesinó brutalmente a su madre en medio de una pelea.

Convivencia forzosa: ¿cómo sobrevivir?

¿Cómo se pueden intentar afrontar los conflictos derivados o agravados por el confinamiento forzoso? Ante todo, afirman los expertos Luciana d’Ambrosio Marri y Andrea Castiello d’Antonio, usando la palabra no como un arma para agredir al otro, sino como instrumento para dar voz a los sentimientos de cada uno, con el objetivo de identificar y de reconducir las situaciones conflictivas.

Y después, ahora que tenemos tiempo, intentar escuchar de verdad, con la cabeza y el corazón, lo que el otro quiere comunicar de sus emociones, amarguras, angustias, dudas.

Sin buscar un chivo expiatorio, sino un honrado por qué, respecto al cual casi nunca hay uno que tenga razón y otro que no, sino que coexisten varias necesidades y puntos de vista nunca comunicados mutuamente, que han llevado a equívocos, a una acumulación de incomprensiones y a desarrollar mucha hostilidad.

No es un esfuerzo fácil, pero estos tiempos difíciles nos deberían enseñar a elegir y combatir por aquello que de verdad es importante.

El perdón

Y por último, pero no en último lugar, el perdón: este gran recurso del alma humana que el creyente puede pedir a Dios para que le ayude a llevarlo a cabo. Entre las tentaciones más grandes está la de pelear para imponerse a toda costa, y entre los mayores males, el de llegar a odiar al más próximo de los prójimos. La casa no es siempre dulce, pero cuidado, no nos quedemos sin casa.

¡Feliz cumpleaños Padre Catalino!

¡Feliz cumpleaños Padre Catalino!

Que Dios le haga arder de amor divino en la contemplación de la pasión de su Hijo y en su entrega al servicio de la Iglesia, a imagen de Santa Catalina de Siena, y que, por su intercesión, le conceda vivir asociado al misterio de Cristo. Oramos, en este día de su cumpleaños, para que, también, el Señor le sostenga, guarde y guíe en su ministerio y en su vida. Que el amor de Dios lo conforte, ninguna tribulación le haga desmayar y que pueda alcanzar la salvación en Cristo Jesús que es eterna gloria. ¡Felicidades!

El Buen Pastor lleva ayuda a sectores necesitados para enfrentar el Covid-19

El Buen Pastor lleva ayuda a sectores necesitados para enfrentar el Covid-19

Nuestra Parroquia El Buen Pastor entregó alimentos, mascarillas y guantes a los hermanos de los sectores La Esperanza, La Caobita, San Luis y La Bomba para ayudar a enfrentar la pandemia a aquellos que más lo necesitan.

Voluntarios de la Pastoral Social de nuestra parroquia distribuyeron las raciones de alimentos a los padres de los estudiantes del Centro Educativo El Buen Pastor en las instalaciones del plantel, así como los materiales para protegerse del Covid-19 a los habitantes de los barrios de nuestra zona parroquial, durante un recorrido.

El Buen Pastor siempre comprometido con el bienestar de su comunidad, aun en tiempos de crisis, porque todos somos uno.

 

El Papa anima a redescubrir en mayo la belleza de rezar el Rosario en familia

El Papa anima a redescubrir en mayo la belleza de rezar el Rosario en familia

Francisco propone una oración al final del Rosario contra el Covid-19.

En una carta dirigida a todos los fieles con motivo del comienzo del mes de mayo, mes especialmente dedicado a la devoción a la Virgen María, el Papa Francisco propone redescubrir “la belleza de rezar el Rosario en casa durante el mes de mayo” con la familia.

En la carta, difundida este sábado 25 de abril, el Pontífice señala que “las restricciones de la pandemia (de coronavirus) nos han ‘obligado’ a valorizar esta dimensión doméstica, también desde un punto de vista espiritual”.

El Santo Padre especifica que hay libertad para elegir, según la situación, “rezarlo juntos o de manera personal, apreciando lo bueno de ambas posibilidades. Pero, en cualquier caso, hay un secreto para hacerlo: la sencillez; y es fácil encontrar, incluso en internet, buenos esquemas de oración para seguir”.

Francisco asegura que “contemplar juntos el rostro de Cristo con el corazón de María, nuestra Madre, nos unirá todavía más como familia espiritual y nos ayudará a superar esta prueba”.

Asimismo, propone dos oraciones a la Virgen “que pueden recitar al final del Rosario, y que yo mismo diré durante el mes de mayo, unido espiritualmente a ustedes”.

Las oraciones son las siguientes:

Oración 1:

Oh María,
tú resplandeces siempre en nuestro camino
como un signo de salvación y esperanza.
A ti nos encomendamos, Salud de los enfermos,
que al pie de la cruz fuiste asociada al dolor de Jesús,
manteniendo firme tu fe.

Tú, Salvación del pueblo romano,
sabes lo que necesitamos
y estamos seguros de que lo concederás
para que, como en Caná de Galilea,
vuelvan la alegría y la fiesta
después de esta prueba.

Ayúdanos, Madre del Divino Amor,
a conformarnos a la voluntad del Padre
y hacer lo que Jesús nos dirá,
Él que tomó nuestro sufrimiento sobre sí mismo
y se cargó de nuestros dolores
para guiarnos a través de la cruz,
a la alegría de la resurrección. Amén.

Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios,
no desprecies nuestras súplicas en las necesidades,
antes bien líbranos de todo peligro, oh Virgen gloriosa y bendita.

Oración 2:

«Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios».

En la dramática situación actual, llena de sufrimientos y angustias que oprimen al mundo entero, acudimos a ti, Madre de Dios y Madre nuestra, y buscamos refugio bajo tu protección.

Oh Virgen María, vuelve a nosotros tus ojos misericordiosos en esta pandemia de coronavirus, y consuela a los que se encuentran confundidos y lloran por la pérdida de sus seres queridos, a veces sepultados de un modo que hiere el alma. Sostiene a aquellos que están angustiados porque, para evitar el contagio, no pueden estar cerca de las personas enfermas. Infunde confianza a quienes viven en el temor de un futuro incierto y de las consecuencias en la economía y en el trabajo.

Madre de Dios y Madre nuestra, implora al Padre de misericordia que esta dura prueba termine y que volvamos a encontrar un horizonte de esperanza y de paz. Como en Caná, intercede ante tu Divino Hijo, pidiéndole que consuele a las familias de los enfermos y de las víctimas, y que abra sus corazones a la esperanza.

Protege a los médicos, a los enfermeros, al personal sanitario, a los voluntarios que en este periodo de emergencia combaten en primera línea y arriesgan sus vidas para salvar otras vidas. Acompaña su heroico esfuerzo y concédeles fuerza, bondad y salud.

Permanece junto a quienes asisten, noche y día, a los enfermos, y a los sacerdotes que, con solicitud pastoral y compromiso evangélico, tratan de ayudar y sostener a todos. Virgen Santa, ilumina las mentes de los hombres y mujeres de ciencia, para que encuentren las soluciones adecuadas y se venza este virus.

Asiste a los líderes de las naciones, para que actúen con sabiduría, diligencia y generosidad, socorriendo a los que carecen de lo necesario para vivir, planificando soluciones sociales y económicas de largo alcance y con un espíritu de solidaridad.

Santa María, toca las conciencias para que las grandes sumas de dinero utilizadas en la incrementación y en el perfeccionamiento de armamentos sean destinadas a promover estudios adecuados para la prevención de futuras catástrofes similares.

Madre amantísima, acrecienta en el mundo el sentido de pertenencia a una única y gran familia, tomando conciencia del vínculo que nos une a todos, para que, con un espíritu fraterno y solidario, salgamos en ayuda de las numerosas formas de pobreza y situaciones de miseria. Anima la firmeza en la fe, la perseverancia en el servicio y la constancia en la oración.

Oh María, Consuelo de los afligidos, abraza a todos tus hijos atribulados, haz que Dios nos libere con su mano poderosa de esta terrible epidemia y que la vida pueda reanudar su curso normal con serenidad.

Nos encomendamos a Ti, que brillas en nuestro camino como signo de salvación y de esperanza. ¡Oh clementísima, oh piadosa, oh dulce Virgen María! Amén.

 

Nota tomada de Aciprensa

El Papa: Cuidado con vivir la fe sólo de transmisiones

El Papa: Cuidado con vivir la fe sólo de transmisiones

En la misa, Francisco pidió por las mujeres embarazadas en este tiempo de incertidumbre.

El 17 de abril, en la Misa en la Casa Santa Marta del Vaticano, el Papa Francisco habló del riesgo de una fe gnóstica, sin comunidad y sin contacto humano real, vivida sólo a través de transmisiones en directo que “viralizan” los sacramentos. 

Estas palabras las ofreció en su homilía referente al Evangelio del día (Jn 21 1-14), en el que Jesús resucitado se aparece a los discípulos en la orilla después de una pesca infructuosa en el Mar de Tiberíades.

Invitados por el Señor a tirar las redes de nuevo, llenaron las redes con peces. Es una escena –dijo Francisco– que tiene lugar de forma natural, porque los discípulos se habían familiarizado con Jesús.

Nosotros los cristianos, explicó, debemos crecer en esta familiaridad, que es personal pero comunitaria. Una familiaridad sin comunidad, sin Iglesia, sin los sacramentos, es peligrosa, puede convertirse en una familiaridad gnóstica, separada del pueblo de Dios.

“En esta pandemia –observó– nos comunicamos a través de los medios de comunicación, pero no estamos juntos, como es el caso de esta Misa”.

Es una situación difícil en la que los fieles no pueden participar en las celebraciones y sólo pueden hacer la comunión espiritual, afirmó.

Tenemos que salir de este túnel para volver a estar juntos porque esto no es la Iglesia, sino una Iglesia que corre el riesgo de ser “viralizada”.

Que el Señor – es la oración del Papa – nos enseñe esta familiaridad concreta, esta intimidad con Él, pero en la Iglesia, con los sacramentos y con el santo pueblo fiel de Dios. 

Intención de la misa

Al iniciar la celebración, el Papa pidió por las mujeres embarazadas en medio de esta insertidumbre.

“Quisiera que hoy rezáramos por las mujeres que están embarazadas, mujeres embarazadas que se convertirán en madres y están inquietas, preocupadas. Una pregunta: ‘¿En qué mundo vivirá mi hijo?’.

Recemos por ellas, para que el Señor les dé el coraje de seguir adelante con estos hijos con la confianza de que ciertamente será un mundo diferente, pero siempre será un mundo que el Señor amará mucho”.

Antes de salir de la Capilla dedicada al Espíritu Santo, se entonó la antífona mariana que se canta en el tiempo pascual, el Regina Coeli.

Regína caeli laetáre, allelúia.
Quia quem merúisti portáre, allelúia.
Resurréxit, sicut dixit, allelúia.
Ora pro nobis Deum, allelúia.

Puedes encontrar el texto de la homilía en Vatican News.

Este artículo proviene del portal Aleteia

Obispos invitan a la Jornada de Oración por el fin del Covid-19

Obispos invitan a la Jornada de Oración por el fin del Covid-19

Animán a dar seguimiento a los estudios de los niños y fortalecer la Iglesia doméstica.

Santo Domingo, Rep. Dom. El Consejo Permanente de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED) invitó a la ciudadanía a unirse a la Jornada Nacional de Oración, el próximo domingo 26 de abril, de 9:00 a.m. a 11:00 a.m., para pedir por el fin de la pandemia del coronavirus (COVID-19).

Mediante un comunicado, informaron que la Jornada será transmitida a través de diferentes plataformas de comunicación.desde la Catedral San Santiago Apóstol, durante la primera hora, y después desde la Catedral Primada de América. El evento concluirá con la celebración de la Eucaristía en cada diócesis del país. 

Otros puntos

Los presbíteros animaron a los padres y tutores a dar seguimiento a los estudios de los niños y fortalecer desde sus hogares la Iglesia doméstica, amar al prójimo quedándose en casa y ser creativos en la dinámica de la transmisión de la fe y los demás valores.

Además, recordaron que “la Iglesia no está cerrada” porque hay una Iglesia en cada hogar y aseguraron que continuarán desarrollando su pastoral social de asistencia a los enfermos, pobres, adultos mayores y privados de libertad.

Los obispos reconocieron los “grandes héroes” que con sus servicios se exponen a ser contagiados. Asimismo exhortaron a mantenerse vigilantes para que todo proceso se realice con transparencia y de acuerdo con lo establecido por la ley.

También motivaron a la población a ser más estrictos en la observancia de las disposiciones sobre el distanciamiento social y las medidas de higine dictadas por las autoridades del país. 

Puedes leer el comunicado aquí       

10 datos que debes saber sobre el Domingo de la Divina Misericordia

10 datos que debes saber sobre el Domingo de la Divina Misericordia

La celebración del Domingo de la Divina de la Misericordia tiene lugar en el segundo Domingo de Pascua ¿Qué es y por qué es tan importante este día para los católicos? Estos son 10 datos que debes saber al respecto:

1. El Domingo de la Misericordia se origina en revelaciones privadas

La celebración de esta fiesta se origina en las revelaciones privadas de Santa Faustina Kowalska, religiosa polaca que recibió mensajes de Jesús sobre su Divina Misericordia en el pueblo de Plock, Polonia.

2. Forma parte del calendario de la Iglesia gracias a San Juan Pablo II

En el año 2000, San Juan Pablo II canonizó a Santa Faustina y durante la ceremonia dijo que “es importante que acojamos íntegramente el mensaje que nos transmite la palabra de Dios en este segundo domingo de Pascua, que a partir de ahora en toda la Iglesia se designará con el nombre de ‘Domingo de la Divina Misericordia’”. (Homilía, 30 de Abril, 2000).

3. Esta revelación privada tiene efectos válidos en la liturgia

En su comentario teológico sobre el mensaje de Fátima, el entonces Cardenal Joseph Ratzinger, ahora Papa Emérito Benedicto XVI, escribió: “podemos añadir que a menudo las revelaciones privadas provienen sobre todo de la piedad popular y se apoyan en ella, le dan nuevos impulsos y abren para ella nuevas formas. Eso no excluye que tengan efectos incluso sobre la liturgia, como por ejemplo muestran las fiestas del Corpus Domini y del Sagrado Corazón de Jesús”.

4. La Iglesia invita a celebrar la Divina Misericordia de varias formas

Entre otras cosas, ofrece una indulgencia plenaria: “para hacer que los fieles vivan con intensa piedad esta celebración, el mismo Sumo Pontífice (Juan Pablo II) ha establecido que el citado domingo se enriquezca con la indulgencia plenaria para que los fieles reciban con más abundancia el don de la consolación del Espíritu Santo y cultiven así una creciente caridad hacia Dios y hacia el prójimo, y una vez obtenido de Dios el perdón de sus pecados, ellos a su vez perdonen generosamente a sus hermanos”. [Decreto de la Penitenciaría Apostólica del 2002]

5. La imagen de la Divina Misericordia fue revelada por Jesús mismo

Esta imagen le fue revelada a Santa Faustina en 1931 y Jesús mismo le pidió que se pintara. Luego el Señor le explicaría su significado y lo que los fieles alcanzarán con ella.

En la mayoría de versiones Jesús se muestra levantando su mano derecha en señal de bendición, y apuntando con su mano izquierda sobre su pecho fluyen dos rayos: uno rojo y otro blanco.

“El rayo pálido simboliza el Agua que justifica a las almas. El rayo rojo simboliza la Sangre que es la vida de las almas (…). Bienaventurado quien viva a la sombra de ellos” (Diario, 299). Toda la imagen es un símbolo de la caridad, el perdón y el amor de Dios, conocida como la «Fuente de la Misericordia».

6. Esta devoción cuenta con oraciones particulares

La Coronilla es un conjunto de plegarias utilizadas como parte de la devoción a la Divina Misericordia.

Se suele rezar a las 3:00 pm (el momento de la muerte de Jesús) utilizando las cuentas del Santo Rosario, pero con oraciones diferentes. Puede acceder a la Coronilla en el siguiente enlace.

7. La Divina Misericordia está vinculada al Evangelio del segundo Domingo de Pascua

La imagen de la Divina Misericordia representa a Jesús en el momento en que se aparece a los discípulos en el Cenáculo –tras su resurrección–, cuando se les da el poder de perdonar o retener los pecados.

Este momento está registrado en Juan 20:19-31, que es la lectura del Evangelio de este domingo.

Ese pasaje se lee ese día porque incluye la aparición de Jesús al apóstol Tomás, en la que lo invita a tocar sus llagas. Este evento ocurrió en el octavo día después de la Resurrección (Juan 20:26) y por ello se utiliza en la liturgia ocho días después de la Pascua.

8. Los sacerdotes tienen una facultad especial para administrar la Divina Misericordia

En Juan 20, 21-23 dice: “Jesús les dijo otra vez: ‘La paz con vosotros. Como el Padre me envió, también yo os envío’. Dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo: ‘Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos’”.

9. La confesión es la acción de la Divina Misericordia hasta el fin de los tiempos

Jesús capacitó a los apóstoles (y sus sucesores en el ministerio) con el Espíritu Santo para perdonar o retener (no perdonar) los pecados.

Debido a que están facultados con el Espíritu de Dios para hacer esto, su administración del perdón es eficaz: realmente elimina el pecado en lugar de ser solo un símbolo de perdón.

10. En las revelaciones privadas Jesús le da suma importancia a su Segunda Venida

Jesús promete regresar en gloria a juzgar al mundo en el amor, como claramente lo dice en su discurso del Reino en los capítulos 13 y 25 de San Mateo.

Solo en el contexto de una revelación pública como es enseñado por el Magisterio de la Iglesia se puede situar las palabras de la revelación privada dada a Sor Faustina:

“Prepararás al mundo para Mí última venida”. (Diario 429)

“Habla al mundo de mi Misericordia….Es señal de los últimos tiempos después de ella vendrá el día de la justicia. Todavía queda tiempo que recurran, pues, a la Fuente de Mi Misericordia”. (Diario 848)

“Habla a las almas de esta gran misericordia Mía, porque está cercano el día terrible, el día de Mi justicia”. (Diario 965)

“Estoy prolongándoles el tiempo de la misericordia, pero ay de ellos si no reconocen este tiempo de Mi visita”. (Diario 1160)

“Antes del Día de la justicia envío el día de la misericordia”. (Diario 1588)

“Quien no quiera pasar por la puerta de Mi misericordia, tiene que pasar por la puerta de Mi justicia”. (Diario 1146)

Traducido y adaptado por Diego López Marina. Publicado originalmente en National Catholic Register.